viernes, 27 de febrero de 2015

CAMBIO DE PERCEPCIÓN

La culpa viene siendo una de los grandes problemas de la percepción humana en nuestra actual sociedad. Comprender el perdón nos lleva a experimentar un gran paso hacia el crecimiento espiritual.

No te engañes. Si sigues sufriendo, si te sientes víctima del mundo o de alguna persona en concreto, si por dentro estás juzgando o atacando a lo que ves… no has perdonado. El perdón se caracteriza fundamentalmente por sus efectos: paz interior y liberación de los hechos y las personas. Puede que pienses que has hecho un buen número de visualizaciones, o que hayas llorado algo tan intensamente que te de la sensación de que el perdón ya esté concluido. Sin embargo, el perdón no se define por el esfuerzo realizado ni por la cantidad de sufrimiento que hayas expresado. Se define por sus efectos liberadores, y estos suceden solamente cuando en la profundidad de tu mente se asienta un verdadero cambio de percepción.

UNA DECISIÓN AL CAMBIO

Según somos, así vemos el mundo, y según vemos el mundo, así creemos ser. Esto se debe a que, en realidad, y tras la apariencia de un cuerpo, una serie de disfraces sociales y una batería de recuerdos personales, lo que somos es conciencia pura. La conciencia se define por ver. El “modo de ser” de un punto de conciencia concreto no es otra cosa que un particular modo de ver o percibir al que habitualmente llamas “yo”.